Sebastian Vettel gana a la grande en el gp de Australia
Vitaly Petrov consigue el primer podio de su carrera en la Fórmula 1
Primer Gran Premio de la temporada 2011 y, tal y como se esperaba, Red Bull y, en concreto, SebastianVettel han arrasado. Desde la calificación, el actual campeón del mundo ha aplastado literalmente a sus rivales, con un coche, que si el año pasado era bueno, este año es aún mejor. Pese a todo, resalta mucho el resultado final de su compañero de equipo, Mark Webber, que en su propia casa no ha estado a la altura, pues ha acabado la prueba en quinta posición.
Las suspicacias pueden saltar, pero parece poco probable que un equipo tan sólido como Red Bull dé ya, desde el inicio de la temporada, mejor material a Vettel que a Webber. Quién sabe, pero más bien todo apunta a que Mark Webber no ha estado todo lo afinado que debiera. Sea como fuere, lo que es incontestable es el potencial de los austríacos.
Al margen de ello, una de las cosas más sorprendentes de Melbourne ha sido la competitividad de McLaren, quienes hace apenas tres semanas estaban completamente perdidos y hundidos en las pruebas invernales. No parece que a lo largo de éstas hayan estado ocultando grandes cosas, sino simplemente que han despertado, ‘se han puesto las pilas’, como se suele decir, y han dado un paso de gigante trabajando a destajo en la fábrica de Woking. No en vano son uno de los grandes de todos los tiempos, cosa que han demostrado con creces en este inicio de Mundial. Así, Lewis Hamilton ha firmado un magnífico segundo puesto, a pesar de tener parte de su monoplaza dañado por una pasada de frenada en la curva 1 y la consecuente salida de pista. Al igual que en Red Bull, su compañero de equipo ha rendido bastante menos, consiguiendo tan sólo la sexta plaza.
En tercer lugar ha quedado un sorprendente Vitaly Petrov, que ha subido al podio por primera vez en su carrera deportiva en la F1. Sin duda, el ruso debió de aprender mucho acerca de la gestión de la presión en Abu Dhabi el año pasado, cuando Alonso lo perseguía, pues a pesar del acoso al que ha sido sometido por el asturiano no ha cometido un sólo error y ha conducido con mucha consistencia. El R31 ha certificado el altísimo potencial que le vimos en pretemporada y será uno de los asiduos al podio esta temporada.
De hecho, debemos de recordar que algunas de las soluciones aerodinámicas de los galos, como los escapes adelantados, han sido copiados por todos los equipos punteros de la parrilla. Como en los dos anteriores equipos resalta el pésimo rendimiento de su compañero de equipo, Nick Heidfeld, quien sólo ha podido ser décimo cuarto. Pronto sabremos el porqué de esto, tras el comunicado de Renault, pero el rendimiento del alemán ha sido excesivamente bajo.
Cuarto ha sido un combativo y, como siempre, espectacular Fernando Alonso, que se ha visto muy perjudicado en la salida, pero cuyo coche no hubiera dado para mucho más, como el propio asturiano ha reconocido tras la carrera. La decepción de la escudería ha sido grande y no la han ocultado, precisamente, pues ayer, tras la calificación reconocían que el coche estaba muy lejos de los Red Bulls y que les quedaba un largo camino para ponerse a la altura de éstos. No obstante, en carrera, la diferencia no ha sido tanta, pues el ritmo del 150º Italia era bastante bueno. Desde nuestro punto de vista todavía es pronto para sacar conclusiones, pues las condiciones de pista vistas en Melbourne han sido bien raras para lo que es el Campeonato del Mundo de Fórmula 1.
18ºC de temperatura en pista son muy pocos y éstos se ven solo en los tests que se desarrollan en invierno, como les contamos pretemporada tras pretemporada desde estas páginas. Habrá que esperar a Malasia, con sus altísimas temperaturas, para poder valorar esto con precisión. Pese a todo, que nadie se engañe, la distancia con Red Bull es grande y Adrian Newey ha vuelto a crear una máquina intratable. Resaltar también, una vez más, el pésimo papel de Massa, incapaz de pasar de la novena posición, por detrás de Pérez y Kobayashi. Sin duda, el paulista es una rémora para los italianos, que les hace perder muchos puntos para el equipo. Aún así, démosle un voto de confianza, a ver cómo sigue el resto de la temporada.
Otra gran sorpresa han sido los Sauber de Pérez y Kobayashi, que han acabado dentro de los puntos, en séptimo y octavo lugar respectivamente. Calificación que no han conseguido por la fortuna de las carreras, sino por méritos propios, peleando en la pista. El mejicano ha sido el más espectacular de todos, haciendo una carrera de una sola parada, lo que significa que ha conducido mimando los neumáticos y con mucha finura, pues de lo contrario no hubiera llegado al final de la prueba. Lo cierto, es que ha tenido su recompensa: acabar su primera carrera en la F1 dentro de los puntos, lo que debería cerrar muchas bocas, que han dicho que está en la máxima categoría del automovilismo sólo por el dinero que ha pagado su patrocinador.
En cuanto al segundo español en parrilla, Jaime Alguersuari, ha tenido mala suerte, pues tuvo un toque en la salida, que arruinó toda su carrera, teniendo que entrar muy pronto al box. Pese a todo, el Toro Rosso ha dado un paso adelante, pues Buemi ha conseguido el último punto que se repartía al quedar en décima posición. Seguramente, el equipo pueda estar regularmente en los puntos esta temporada, lo que seguro nos asegurará unas carreras espectaculares del catalán.
Junto a las sorpresas de Australia, cabe señalar también la del rendimiento de Mercedes GP, que ha sido un auténtico fiasco, con los dos coches fuera de la pista por sendos toques. No obstante, el ritmo de sus dos monoplazas ha sido bastante pobre y nadie se explica cómo acabaron la pretemporada en tan buena posición y aquí no han podido superar las expectativas.
Por otro lado, esta primera prueba del Mundial deja la impresión de que las cosas no han cambiado mucho, al menos como presuponíamos, por lo que se refiere al desarrollo de las carreras. La verdad, es que se esperaba bastante del alerón móvil y del KERS para favorecer los adelantamientos, pero no ha sido así. Es justo decir que todavía se tiene que ajustar más precisamente la norma del alerón y que quizás aquí se ha usado de forma demasiado restrictiva, con un corto espacio donde podía usarse. Veremos en Malasia.